Ustrasana es la postura del camello, de aquel que tiene capacidad para gestionar las aguas dentro de sí, la fluidez para moverse por el «desierto«. La capacidad de fluir siempre se ha asociado con nuestra capacidad para crear. Aquello a lo que nos entregamos con pasión y con lo que fluimos se convierte en el mayor regalo de nuestra capacidad creadora. Ustrasana nos conecta particularmente con svadhistana chakra, el chakra del agua, de la fluidez, de la capacidad de crear, aunque también con anahata (el chakra del corazón) y vishuda (el chakra de la voz). Todo ello nos habla de la expresión desde la autenticidad del Ser, desde la entrega absoluta. Habla de “expresarnos a través de nuestras creaciones auténticas, las que nacen desde la conexión con el corazón”. A través de Ustrasana nos mostramos al mundo tal cual somos, sin miedos, abiertos, entregados, sinceros, limpios, totalmente transparentes.
Beneficios de Ustrasana
Es una postura que alivia la rigidez de la parte superior de la espalda y los hombros. La inclinación hacia atrás dota de un masaje activador de los órganos abdominales y reproductores. También nos ayuda a abrir las vías respiratorias, mejorando posibles problemas respiratorios como el asma y facilita la oxigenación cerebral aliviando dolores de cabeza y migrañas.
Marmaterapia de Ustrasana
En esta ocasión he elegido como puntos marmas principales que estimula Ustrasana: Sphij, Kati, Kukundara y Vrukka.
Sphij, situados uno en cada muslo bajo el pliegue glúteo. Promueve la circulación de las piernas, alivia los dolores de la espalda baja y en caso de ciática. A nivel orgánico estimula el funcionamiento del colon y alivia dolores del aparato reproductor.
Kati, a cada lado del comienzo del sacro. Estimula la acción del hígado y apoya la función renal. Su acción mejora problemas debidos a infecciones como la cistitis o piedras en el riñón. Es especialmente positiva su acción sobre el aparato reproductor femenino, tanto para la salud de los ovarios como de las trompas de Falopio.
Kukundara, justo por encima del glúteo. Regula la actividad del colon, hígado y riñones. Alivia el dolor de la parte baja de la espalda.
Vrukka, a la altura de la 12 vértebra. Regula el funcionamiento del hígado y sobre todo el de los riñones y las glándulas renales, aliviando el dolor lumbar y de la parte baja de la espalda. Su acción mejora problemas debidos a infecciones como la cistitis o piedras en el riñón.
Con todo ello, cada vez que entramos en Ustrasana estamos activando especialmente nuestro sistema urinario y del movimiento de las “aguas internas” que facilitan la eliminación de las sustancias tóxicas acumuladas en nuestro organismo.
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Autora: Minerva Tejero Ardines
