“El Ayurveda es la ciencia que muestra las condiciones de vida apropiadas e inapropiadas, afortunadas o desafortunadas, lo que es favorable y lo que no lo es para la longevidad, así como la forma de valorar la vida en sí misma.” – Charaka Samhita I,41.

La palabra Ayurveda está compuesta por ayus (vida) y veda (conocimiento), así pues, el Ayurveda es “el conocimiento de la vida”. Es uno de los sistemas de medicina más antiguos del mundo. Entre los primeros doctores de los que se tiene constancia a través de los textos védicos nos encontramos por ejemplo con Charaka como el primer médico en presentar los conceptos de digestión, metabolismo e inmunidad, Sushruta como padre de la cirugía que realizó la primera operación de cataratas y elaboró las primeras referencias detalladas acerca de la anatomía humana y a quien debemos las primeras descripciones acerca de cómo debía construirse un lugar clínico o Vagbhata con sus aportaciones a través de la fitoterapia y el tratamiento medicinal a través de las plantas. Todo un compendio de saber que en gran medida ha llegado hasta nuestros días.

Este conocimiento comenzó originalmente en los pueblos Arios del Valle del Indo (al norte de la India), entre poblaciones sencillas que vivían una profunda conexión con la naturaleza desde el espíritu. Fue esta gran conexión lo que les permitió entender, comprender y transmitir la importancia de vivir en consonancia con la naturaleza y sus ritmos para alcanzar una mayor armonía interna y bienestar. Viviendo en equilibrio, respetando la naturaleza, sirviéndonos de ella con respeto y siguiendo sus ritmos que son los nuestros el ser humano podría disfrutar de una vida sana y longeva. El Ayurveda entiende la enfermedad como un desequilibrio de la persona y no como una sintomatología a subsanar, es en la comprensión del ser, de lo que le ocurre, de lo que le ha llevado a ese desequilibrio donde el Ayurveda aplica diferentes tipos de tratamiento para el restablecimiento del equilibrio y por lo tanto sanar a la persona. Es la comprensión del ser como un todo. 

El Ayurveda dice: “Existen tres cualidades o fuerzas para que la realidad se exprese (sattva, tamas y rajas o más someramente equilibrio, pasivo y activo). La combinación de ellas da lugar a los 5 elementos, presentes en toda materia existente. En los seres vivos el pulso vital los mantiene en movimiento. La proporción de elementos así como su interacción es única en cada ser vivo. Según esta teoría venimos al mundo con un ideal de combinación armónica y equilibrada con la que operan estas fuerzas dentro de nosotros, en ese equilibrio ideal estamos en plenitud, bienestar y máximo potencial (nuestra esencia). Alcanzar este estado es lo que se convierte en nuestro proyecto de búsqueda espiritual durante toda nuestra vida.”

De este modo, los cinco elementos se agrupan por pares dentro de cada ser vivo conformando las tres Doshas: Vata (aire+éter), Pitta (fuego+agua), Kapha (agua+tierra). Estos, tres tipos de energía definen las características constitucionales de cada ser vivo. A través de la inter-relación de estas fuerzas con el resto del universo, los otros seres, la naturaleza y más íntimamente con lo que ingiero me acerca o me aleja de ese ideal. Y para devolvernos al equilibrio, el Ayurveda propone diferentes formas de abordaje (masaje, nutrición, fitoterapia, cirugía…). Sugerencias como la Meditación, la práctica del Yoga, el pensamiento positivo o la adopción de hábitos más saludables son esenciales en el tratamiento Ayurvédico de una dolencia.

En un próximo post hablaremos más ampliamente de las características de cada una de las deshas y como interactúan dentro de nosotros. Si quieres conocer más acerca de esta técnica milenaria y sus beneficiosos efectos sobre nuestra salud y bienestar no dejes de visitar esta página web o suscríbete a mi Newsletter o seguirme a través del canal de YouTube.

Autora: Minerva Tejero Ardines

 

 

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